Darte un voltio por Feisbukland y acabar de narices en un oscuro sótano rodeado de un grupo de adultos ausentes -entre los que hay dos calvos a lo gotas de agua, y gente nacida en Abingdon- tratando de bajar una escalera en helicóptero, con la sana intención de destapar una olla a rebosar, no de garbanzos, sino de secretos que molaría mazo confesar, pero que mejor te los callas, no seas guarrote, y si no te puedes aguantar, te vas y lo susurras entre colegas con ritmo y gracia, pero sin que se entere tu madre.
El Aprendiz de Activista suelta suspiro con moquillo y Sniff profundo tras visionar por segunda vez la entrevista que Gabilondo ha realizado a José Luis Sampedro hace un par de horas.
Qué emocionante, ¿no cree? Apenas si conozco la obra de ese buen señor, pero qué bueno es, qué gusto oírle. Recuerdo haberle visto hace tiempo en un programa de La Uno, pero no hice mucho caso, zapeaba sin rumbo fijo mientras comía pizza... Fue a partir de la presentación del libro de Hessel cuando me quedé con su cara.
Tu hermana nos ha dicho que te tomaste a broma lo de que el prólogo de la obra de un nonagenario fuese a su vez escrito por otro nonagenario...
Esa señora de ahí no es mi hermana. Es una vecina. Y muy cotilla, no haga caso. Pero sí, pensé que era una estrategia de marketing a lo vamos a buscar abuelos que así le damos más solera a la cosa. Qué estupidez por mi parte. Ahora lo sé. Aunque la intencionalidad siempre está ahí, y con los temas promocionales nunca se sabe.
Antes de seguir, si te parece, dejemos que los demás también vean el vídeo, y luego comentamos...
¿Hay algo de todo lo que se dice que te haya parecido inadecuado?
Ya que me preguntas, sí. Estamos en un momento de mucha confusión, donde cada uno entiende lo que quiere entender, y las palabras se convierten en cuchillos arrojadizos y luego se tergiversan las cosas y los ciudadanos arrastrados por los quehaceres diarios tiran de tópicos y, al final, lo importante sólo llega a los mismos de siempre. Lo bueno de Sampedro es que habla sin posicionarse ideológicamente, hasta que se emociona, se sienta donde más cómodo está, y Gabilondo tiene que salvar a Sampedro del propio Sampedro. Sólo digo que hay que tener cuidado, sabiendo que siempre habrá los que busquen un lado desde el que insultar a los del supuesto otro lado.
¿Y qué es lo importante para ti, aquello que no debe perderse entre los lados del cubo?
Lo que está ocurriendo en la calle: miles de ciudadanos tomando las plazas, de forma pacífica, mostrando su descontento ante un sistema que ni nos escucha, ni cuenta con nosotros; que no atiende a nuestras llamadas, y al que sólo vemos tras el espejo deformante de los medios de comunicación. Las palabras de Sampedro brillan con luz propia al tratar este tema, porque te hablan de tú a tú, desde el corazón, sin ubicación, con una humildad y sencillez que tiran para atrás, expresando a la perfección eso que nos hace cosquillas en las tripas a los que nos consideramos #15M.
Veo que has tomado notas...
Sí, soy un poco repelente, nada contagioso, creo. Se han dicho muchas cosas interesantes, pero hay ciertos mensajes que me han dado de pleno, que mejor expresan lo que está ocurriendo, su razón de ser. Las comparto contigo sin respetar la literalidad y el orden de aparición, porque creo que así cuentan mejor esta historia, la nuestra:
El sistema actual no tiene nada que ofrecer, aparte del dinero y la lógica del beneficio.
Las leyes son siempre la expresión del poder.
La iglesia está petrificada en el siglo XVII, de ahí no sale.
La economía se ha quedado en los supuestos del siglo XVIII.
Sólo un 20% de la humanidad disfruta del 80% de los recursos del planeta.
El despilfarro, el destrozo del medioambiente no podrá continuar mucho tiempo.
Se han destruido los valores humanos.
Ni iglesia, ni economía, ni política. Ya no valen.
Los medios de comunicación son medios de ocultación y desinformación.
Nos educan mal para no tener un pensamiento libre.
Si uno no piensa por su cuenta, uno no tiene libertad. La libertad de expresión se vuelve inútil.
Si vuestra generación estuviera perdida, no estaríais donde estáis. Estáis donde estáis porque no estáis perdidos, porque os habéis encontrado.
Plaza, Pueblo, y Palabra: la palabra del pueblo en la plaza, eso es democracia real.
El nuevo desarrollo económico tendrá que ser Ecológico -sostenible y respetuoso-, tendrá que ser Ético -de todos y para todos-, tendrá que ser Estético -deberá ser algo bello-.
Hay que cambiar Las tres palabras mágicas del sistema actual: Productividad, Competitividad, e Innovación, por VITALIDAD, COOPERACIÓN, y RECREACIÓN.
Tenemos el deber de vivir, y dar vida y mejorar y crecer.
Tenemos que querer que el mundo se civilice.
Y para acabar...
El sueño de Sampedro sobre la evolución del movimiento, esa idea de escuela de la ciudadanía, de educarnos para protegernos ante los descuidos y abusos de este o cualquier otro sistema, siempre desde y para el pueblo, en constante aprendizaje y evolución, en plena democracia participativa, constructiva.
Gracias a la pericia del diseñador de vestuario de la firma patria ‘Mortadelo´s Fashion’, y a la astucia de los artífices de 'Aporréalos cuanto quieras #27M', fue casi imposible identificar a estos falsos "indignados" que, de manera disimulada, llegaron desde el futuro con un único y ¿malintencionado? objetivo.
Soy un trabajador, una estudiante, un desempleado, una madre, un hermano, una abuela, un hijo, una soñadora, un científico, una creyente, un conservador, una progresista, un hombre, una mujer, un ciudadano, una persona... anónima, que escucha, que aprende, que contrasta, que analiza, que opina, que debate, que critica, que propone, que coopera, que renace... cada día, a cada hora, en cada segundo, con todo el tiempo por delante, con todo un futuro que construir, en igualdad, juntos, sin dejar a nadie atrás, en armonía, con respeto, en paz...
Su mundo está en decadencia, sin embargo, el nuestro se abre paso en cada gesto, en cada post, en cada tuit, en cada palabra.
Siempre es buen momento para escuchar el tema completo compuesto por Dario Marianelli para una película entretenida, pero floja en comparación a la genial novela gráfica del mismo nombre, parida por Allan Moore a principios de los 80s, y con el gobierno de Margaret Thatcher en el punto de mira. Una obra de imprescindible lectura en los tiempos que corren -quién nos iba a decir de adolescentes que de adultos tendríamos excusa para comprarnos una careta de Guy Fawkes, y pasear con ella puesta por la plaza de cualquier pueblo.
Creativos bávaros atiborrados de salchichas lanzan la primera campaña de comunicación que lime asperezas entre el alemán medio y un cuarto, y las hortalizas vetadas de lo que presuponen sigue siendo el norte de África.
Identificado el joven indignado que arrojó las coreadas tijeras a los antidisturbios...
Que nuestra pasión mezclada con inocencia e ilusión, no se transforme en equivocado ímpetu que justifique sus trasnochadas maniobras de distracción. Recuerda...
Eso de ir a ducharse un domingo por la tarde, y acordarse, sin venir a cuento, del tonillo de una canción que le va como anillo al dedo a lo que sientes cada vez que piensas en las posibilidades del #15M.
El sonido de un trueno sobresalta el esfínter de nuestro vecino de puerta, que prolonga el estruendo con un ridículo escape a lo cornetilla harto interminable. Absortos ante el improvisado final de los tiempos de un sábado por la tarde-noche, nuestra memoria es asaltada por la humedad de la leche fluyendo a borbotones y el onanismo descarado de una Bjork bajo la piel de un ciborg multiplicado por dos. ¿Por qué?, se preguntará seguro el hijo de nuestra vecina del quinto cuando lea esto... ¿Acaso importa, enano llorón? Que sepamos, siempre es buen momento para disfrutar con el toqueteo de dos almas sintéticas.
Nuevo tema no exento de polémica -ése inquietante parecido con la base de 'Ritmo de la noche'-, idóneo para los sudores y frotamientos caniculares en playas y acampadas non-stop varias. Eso sí, su buenrollismo es tan contagioso, como terrible el corte de pelo de Martin.
I’m on a roll this time
And heaven his in sight
I turn the music up, I got my records on
From underneath a rubble, I sing a rebel song
Don’t want to see another generation drop
I’d rather be in a coma than in a full stop
Maybe I’m in the black, maybe I’m on my knees
Maybe I’m in the gap between the two trapezes
But my heart is beating and my pulses start
Cathedrals in my heart
And we saw oh this light I swear you, emerge blinking into
La Ignorancia Galopante engorda al Señor Ego haciéndole creer que la razón posee una dimensión espacial que la posiciona siempre de su lado, dividiendo el mundo mundial entre los que hacen caso, y aquellos otros que nunca se enteran de nada. La Ignorancia Galopante nace de una educación errónea, y se extiende a hurtadillas cual pandemia infecciosa del pensamiento analítico, aguardando el foro adecuado donde retroalimentarse y replicarse hasta el infinito. La Ignorancia Galopante obvia la comprensión del contexto, su análisis, y la reflexión posterior necesaria para la identificación de objetivos claros y cuantificables, única guía sobre la que obrar en consecuencia, la base sobre la que plantear propuestas de solución con fundamento.
Por suerte, la Ignorancia Galopante se combate mediante la divulgación del CONOCIMIENTO…
